Dos lecturas veraniegas
para pasar la tarde entera
o una siesta placentera
debajo de una sombrilla
mientras el sol calienta y brilla
o tumbado en la piscina
¿Tomando un café?
¿O un té?
Decida usted:
¿Una historia con gominolas,
merendolas,
chuches
para llenar el buche
y galletas deliciosas?
Pues no lo dudes.
¡No te andes con bobadas!
Lo tuyo es
El misterio de la fórmula robada.
¿Una de vecinos
chismosos
curiosos
y quejosos?
Ah, también hay un sabio
un poco agrio
y un robot
que te cocina un entrecot.
¡Lo tengo!
Lee Mi vecino, su robot y yo.
Apúntatelo en la agenda.
Y si no, para la merienda.
El que este a tu lado,
que aprenda.
Te lo dice servidor,
que, a fin de cuentas, soy el escritor.
¡Siempre a tu disposición!
El misterio de la fórmula robada.
Autor: Israel Campos.
Ilustrador: Mario García Arévalo
Autor: Israel Campos.
Ilustrador: Mario García Arévalo
Algar Editorial.
Mi vecino, su robot y yo.
Autor: Israel Campos.
Ilustradora: Iris Amaya.
Colección calcetín, número 149.
Algar editorial.
Mmmmmmmmmmmmmm
ResponderEliminarBonita fotografía de tus libros!!!
En verano,más que en agenda
deben estar sobre la hierba.
Investigar la fórmula robada
para leerlos con galletas.
Pasar a la casa de Mi vecino
para que su robot me lea un poquito.
Buen plan!!! ;-)
¡Mejor es tu poesía tan way!
EliminarMuuuuuchas gracias!!!!