¡Hola!
Navegaba yo en mi barquito de vela por el ancho mar cuando, de pronto, oí un ruido, algo así como un tic, tac, tic, tac. Miré a mi alrededor intentado encontrar de dónde venía el misterioso sonido (yo no uso reloj) y, de improviso, vi a un señor nadando a toda velocidad que, seguro, era capitán de barco. Por su pelo largo y porque, donde debía tener la mano izquierda, lucía un garfio. Y, tras él, el cocodrilo más grande que haya visto jamás. El animal me saludó muy educado y, acto seguido, volvió a perseguir a aquel pobre hombre. Así que me dije que eso tenía que dibujarlo.
Señor, qué cosas me pasan...
Garfio y el cocodrilo.
Acrílicos, rotuladores y acuarelas.
¡Me encanta! este personaje. Me he reído mucho cuando he visto como habías dibujado a este simpático cocodrilo.
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminar¡Es que es todo un señor cocodrilo!
¡¡Muchas gracias!!